viernes, 1 de abril de 2011

Abril: El ultrasonido

Salí de la clínica de radiología con una inmensa felicidad por saberme madre de una beba, de inmediato llame a mi esposo y le dije gritando dentro del carro: -Cielo es una niña, es una niña!! Ya se como se llamara, es una niña y rompí en llanto dándole gracias a Dios el tener de nuevo esa oportunidad y mas porque estaba completando mi familia con una hija.
Claro imaginate a 10 días de celebrar el nacimiento del niño Jesús y yo con mi pancita de embarazo era mi mejor regalo, el saber que Ángela estaba en camino para formar parte de mi familia. había decidido ponerle Ángela Mishel a mi hija porque una ocasión le dije a mi esposo que los hijos que yo le diera se llamarían igual a el, así que el niño ya llevaba su nombre Miguel Ángel y ahora mi beba se llamaría como el papa; esa era mi manera de decirle a el cuanto lo amo.

Nunca falta que nuble tu cielo de felicidad y en mi no era la excepción. Recuerdo que estaba organizando la fiesta de los 4 años de mi hijo y ese día de la fiesta me toco en suerte discutir con mi suegra (que raro!!) ya para ese entonces tenia yo como 6 meses de gestacion, en semanas no recuerdo, pero mas o menos iba por ese mes. Yo para ese entonces diario por las mañanas sobre todo presentaba unas ganas de vomitar pero de aquellas!! Era horrible mi despertar porque nada mas de pensar en eso hasta las ganas de comer se me iban.
Para mi era de lo mas normal pues todas las embarazadas vomitan por la mañana, o no?
Llega el día de la fiesta de mi hijo, discuto con mi suegra, pero me importa un reverendo comino lo que diga ella al respecto de que si invite o no a su ahijada (pinche vieja maleducada, si no me habla para que la invito, para ver jetas?? mejor me veo en el espejo).

Por prudencia y educacion me quede callada y no dije nada, me dije: Mas vale que haya una pendeja y no dos!. Además esa era mi pequeña venganza contra ella porque días antes le había comentado: -Oiga suegra fijese que mi mama quiere organizarme un baby shower y me dice que porque no lo hacemos entre las 3, como ve? así no gastamos mucho. En ese momento mi suegra con ese aire de me importa una chingada lo que te pase me dice: -Mira yo ahorita tengo muchos gastos, no puedo disponer de dinero, ni siquiera para servilletas.
Opte por decir: ok suegra, no se apure que al cabo no es para mi el festejo es para su nieta!! anda pues le diste en donde le dolía porque te negó algo, pues yo también le niego la invitacion a su pinche ahijada que para mi (con perdón de quien me lee) no vale madre.

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