Abril: La llegada

Eran aproximadamente las 2 de la mañana del jueves 10 de abril del 2008 cuando llegamos a Monterrey y de inmediato pedimos información en un oxxo y a un taxista sobre que camino debíamos tomar para llegar al hospital. Cuando decíamos oiga el Hospital Universitario para donde queda? te contestaban amablemente ah, va para el civil! mire se va por aquí, etc, etc.
Yo decía a ver, yo voy al Universitario, no al Civil, pero ya después me aclararon que el hospital civil en Monterrey es el Hospital Universitario!!.

Llegamos al hospital y nos bajamos en la entrada de urgencias, ahí con expediente en mano espere mi ingreso, ya eran casi las 3:00 am afuera se quedo Miguel y Patty, no sabíamos que nos esperaba y la verdad por primera vez tuve que admitir que estaba ahí, sola, con gente extraña, pero sola porque mis familiares que me acompañaban estaban tras de esa puerta. Para mala suerte había un letrero que decía que los informes de las personas que estaban en el área de Ginecología los daban a partir de las 10:00 am, así que faltaban mas de 7 horas para que supieran de mi.
Una vez ingresada y en el área de Toco (así le dicen) esa noche estaba el área hasta la madre de parturientas, entraban y salían los médicos de guardia atendiendo a las que ahí estábamos. Lo que mas me impresiono fue el caso de una chica como de 18 años que por desgracia se le había practicado un aborto y este quedo incompleto, ella lloraba en la puerta, con un llanto silencioso, me provoco ternura el saberla sola e indefensa, lloraba y le pedía permiso a la enfermera para ver a su novio que estaba afuera esperando por ella.

A mi mas de 3 veces me pidieron que relatara el porque de mi llegada, porque como el Dr Siordia llegaba hasta las 7:00 am a hacer recorrido pues tenían que llenar montañas de papeles explicando el porque, cuando, como y donde de mi caso. Así que a los doctores aunque se les quemaban las habas por sacarme la huerca que traía en mi pancita tendrían que esperar las instrucciones del Jefe de Perinatologia del Hospital.
De verdad que es de admirar la labor de esos a los que yo llamo Ángeles, porque van, vienen, no tienen un minuto de descanso y cuando lo tienen es para estudiar algún caso difícil que se les presenta.
Al dar las 7:00 am y yo con un sueño de la chingada porque no había podido mas que dormitar a ratos por todo el jaloneo que había en esa área, además no estaba ahí de vacaciones ni de descanso así que puse mi mejor cara cuando llega el Jefe de área a la primera ronda del día.

Escucha mi caso y decide que se me practiquen una serie de estudios que la verdad no entendía, lo único que si entendí fue la orden que dio de que no probara de momento alimento alguno, ahí si me dio donde mas me dolía porque llevaba sin probar bocado desde las 10 pm del día anterior que me había empacado el sandwich del oxxo, así que yo estaba segura que al medio día me darían permiso de comerme de perdis una gelatinita.
Confiada en eso deje que me sacaran sangre, me inyectaran, me trajeran del tingo al tango por todo el Hospital Universitario, como veía que avanzaban las horas y nada que veía ni a mi marido, ni a Patty, ni mucho menos pensaban en que a la mona que traían de arriba a abajo en una silla de ruedas tenia hambre; me atreví a preguntar al medico residente que me acompañaba: -Oiga dr y a que horas se come aquí?- tratando de no reirse me dijo: -No le dijeron que tenemos la orden de no alimentarle porque necesitamos ver como se comporta su sistema digestivo sin alimento?- abrí mis ojos tan grandes como pude y dije: -Dr no me chingue pues como quiere que reaccione, nomas déjeme sin comer y hasta me engendro en pantera!!