martes, 13 de noviembre de 2012

Canto de sirena

Una noche deje de ser princesa y me lance a la mar para ser una sirena; una noche cualquiera me dejaron sin el hombre que amo.

Mataron al guerrero del que me enamore, 
me arrancaron el corazón y con el parte de la historia que desde niña empecé a escribir.

Amanecí sin sus palabras, sin su amor, amanecí ahogada en llanto por su ausencia y fue tanto mi dolor que decidí irme lo mas lejos de todo y todos, sola, como siempre, para llorar mi dolor.

Tanto llore una noche que al día siguiente mis lágrimas estaban convertidas en mi propio mar.

Lo extraño, cada amanecer salgo a esperarle a la orilla de este mar; cada noche duermo en el fondo del mar, para que nadie sepa cuanta falta me hace dormir a su lado.


No se si algún día regresara el hombre del que me enamore, el hombre al que no le importaba la hora ni el lugar, solo era feliz conmigo. Con el se fueron los te amo, los me gustas, los besos robados, los abrazos inesperados, las noches a su lado, todo.

Quiero llorar y que el llanto se lleve mi tristeza, pero cada lágrima que sale solo se concreta a vivir el instante en que el cae.

Llevo semanas sumida en esto, solo salgo a respirar, tomar aire para luego seguir sumergida mientras escucho una voz que me dice: sigue llorando sirena, que tus lágrimas aumenten el mar y sus olas se lleven y ahoguen tu dolor, que el llanto mate el deseo y las ganas de tenerte, deja de insistir sirena.

Solo la noche puede llevar hasta donde esta su corazón y puedas decirle al oído en un canto de sirena cuanto lo amas...

(6-ago-12)




2 comentarios: