miércoles, 27 de julio de 2011

Ese hombre

Quizás muchos no entenderan mis razones para no mencionarte, para callar tu nombre, pero tu sabes bien que mi amor te pertenece que llegara un momento en que pueda escribir sin miedo a lo que me pueda pasar tu nombre en cualquier lugar.


Sabes que muero de ganas por decir: Si amo a ese hombre que me dice princesa, que llena mis dias, tardes y noches con su amor, cariño, ternura, tiempo, que me da todo sin esperar nada a cambio. 


Ese hombre que a pesar de la distancia me besa apasionadamente me abraza por las noches para dormir a mi lado, despierta en las mañanas y me dice al oído cuanto me ama con un dulce beso.


Ese hombre que con la inocencia y ternura de un niño, ha conquistado mi corazon; ese hombre que me ha hecho el amor en los lugares mas insospechados y a horas insólitas; ese hombre que sabe que lugar de mi anatomía se estremece al contacto de sus caricias y sus besos.


Ese hombre que espera a que yo llegue cada día a decirle en nuestro lugar de amor, cuanto lo extrañe durante las horas que pasé lejos de él.
Ese hombre que lleno mis oídos con su tierna voz diciendome Te amo, te amo, te amo una mañana en que necesitaba imperiosamente escucharlo.


Ese hombre que ha llorado noches enteras por mi y a mi lado, que ha secado con sus besos mis amargas lagrimas de soledad. Y que aún en el peor momento no dejó de amarme ni yo dejé de quererle.


Ese hombre que por las noches se transforma en una sombra, en un ave fénix  para poder cobijarme entre su amor, ternura y pasion para que yo pueda dormir y soñar dulcemente con él. Pero de día es un guerrero, es un dragón para defender lo que sentimos.


Ese hombre que sabe que aunque no me pueda tener no deja de perseguir su sueño, porque su única meta en esta vida es amarme.
Ese hombre es quien se ha convertido en mi vida en una de las razones para seguir luchando y viviendo este día a día.


Ese hombre es el que amo, ese hombre se llama como tu....


SP

















martes, 26 de julio de 2011

A veces

A veces creo que eres un sueño en mi vida, que un dia voy a despertar de el y sólo serás eso, un sueño.


A veces creo que a mi vida llego un rayito de luz en medio de tanta oscuridad, pero que llegará un día la noche y se lo llevara.


A veces te extraño tanto que creo que no existes, que sólo mi mente enferma de soledad te creo para acompañarme.


A veces salgo a la calle a ver si te encuentro entre tanta gente, pero se que eso es imposible porque no estas aqui.


A veces paso horas junto al teléfono esperando una llamada que se que aún no llegará porque no es el momento.


A veces quiero gritar tu nombre, pero sé que no debo; y prefiero gritarlo en la soledad de mis tardes.


A veces lloro esperando que vengas a secar mis lágrimas, me abraces y me digas que no te vas a separar de mi.


A veces por las noches abrazo mi almohada, deseando que seas tu y que en medio de la noche sienta tus brazos ya dormida.


A veces miro el reloj y digo: ¿Cuando llegaras? pero aun no llegas.


Todo eso me pasa, a veces durante el dia.


SP



jueves, 14 de julio de 2011

Ojala

Ojalá y arrancando todas las hojas de todos los calendarios llegara el dia en que te voy a ver por vez primera.


Ojalá y pudiera tomar el tiempo entre mis manos y hacer que éste corra tan aprisa que llegue ya el segundo en que pueda verme en tus ojos.
Ojalá y tuviera ese poder que sólo el tiempo tiene para curar las heridas y fisuras hechas al corazón y al alma por amores pasados.


Ojalá pudiera borrar de la mente y pensamiento las palabras dichas con enojo y cambiarlas por un Te Amo que haga tus días más felices.


Ojalá y pudieras escucharme a la distancia decirte que te extraño, que me importas, que mis palabras de amor te llegaran con claridad hasta tus oídos.


Ojalá y que la sábana que esta noche me cubre, te la pudiera hacer llegar y sintieras como conserva mi calor y te tranquilizara en esas noches de insomnio.


Ojala y que ese beso que cada noche nos enviamos pudiera describirte mi sentir, no te irías de mi lado jamas.


Ojalá y esta noche mientras duermes mis brazos te cuidaran, mi voz te arrullara y pudiera velar tu sueño.


SP











Una mujer

Mi búsqueda no es fácil, en mi paso por éste mundo he conocido toda clase de personas, de todas las condiciones sociales; pero a fin de cuentas sólo se ha tratado de gente, y lo que yo busco es una mujer.

Una mujer que no sea maniquí de aparador, ni la rosa candorosa e ingenua. Tampoco una belleza mercenaria, ni la madre sumisa ni abnegada o la esclava del hogar. Busco una mujer que se atreva a ser ella misma con todas sus potencialidades.

Una mujer que no tema se fuerte, segura e independiente, porque con ello no pierde su femineidad, y en cambio tome el lugar que le corresponde en la evolución de la pareja humana.

Una mujer dispuesta a descubrir y desarrollar todos sus valores y potencial, porque los hombres no maduramos jamás emocionalmente si tenemos compañeras, madres o hermanas que dan poca importancia al crecimiento como personas. La evolución supone un crecimiento compartido.

Una mujer preparada y decidida que, no sólo sepa que hacer, sino cómo y cuando hacerlo, porque asi será un respaldo para mí, como yo con gusto lo seré para ella.
Una mujer que descargue en mí todo el peso de un amor no entregado, porque nunca antes alguien lo habia recibido por completo.

Una mujer que me ayude a verme como soy, no como creo que soy. Que tenga tacto al decirme mis defectos en el momento que soy más receptivo, para que digiera la crítica constructiva y pueda así florecer como persona.
Una mujer que sea tierna sin que pierda la firmeza, seria sin ser solemne, con deseos de triunfar sin sentirse superior, dulce sin ser melosa y con la inocencia de una niña sin caer en lo infantil.

Una mujer que sea mi compañera en todo: desde tender la cama juntos hasta adentrarnos en una aventura intelectual, pasando por la experiencia de trabajar hombro a hombro y recorrer un parque en bicicleta.
Una mujer que a pesar de que sea mi pareja no sea posesiva en mi persona, ni se encele de mi pasado. Que entienda que el pasado ya es historia y que ella significa mi presente y mi esperado futuro.

Una mujer que ame intensamente, que aunque con palabras no el diga que la amo, en una caricia sienta todo el amor el amor que soy capaz de darle. Cuando al fin la encuentre no la dejará ir de mi lado.

Entonces pregunto: ¿Esa mujer serás tú?

Anónimo

miércoles, 13 de julio de 2011

Un hombre

Mi búsqueda no es sencilla. He encontrado a mi paso amigos, enemigos, intelectuales, conocidos; pero aún continúo mi búsqueda, porque lo que yo deseo es solamente un hombre.
Un hombre tan seguro de si mismo que no tema mi plena realización como mujer; que jamas me considere su rival en ningún aspecto, sino que sea para mi como yo para él: eternos compañeros.

Un hombre que no tema a la ternura; que se atreva a ser débil cuando necesite detenerse a recobrar fuerzas para la lucha diaria; que no piense que al amarme lo derroto o que al amarme me aniquila.
Un hombre que me proteja de los demás y de mi misma. Que conozca mis errores, los acepte y me ayude a corregirlos.

Un hombre que con cada amanecer alimente nuestro amor con delicadeza; que sepa que para mi una flor entregada con un beso tiene más valor que una joya entregada por un mensajero.
Un hombre con quien pueda hablar, que jamás corte el puente de comunicación; ante quien me atreva a decir todo lo que pienso sin temor a que me juzgue o a que me ofenda; que sea capaz de decírmelo todo, incluso hasta que no me ama.

Un hombre que siempre tenga los brazos extendidos para que yo me refugie en ellos cuando me sienta amenazada o insegura; que conozca su fortaleza y mi debilidad, pero que jamás se aproveche de ella.
Un hombre a quien lo domine el entusiasmo y ame intensamente la vida; para quien cada día sea un regalo inapreciable que se tiene que vivir plenamente, aceptando el dolor y la alegría con igual serenidad.

Un hombre que sepa ser siempre mas fuerte que los obstáculos; que jamas se amilane ante la derrota, y para quien los contratiempos sean más un estímulo que adversidad.
Un hombre que esté tan seguro de su hombría que no sienta la necesidad de demostrarla a cada minuto.

Un hombre que no sea egoísta; que no pida lo que aún no se ha merecido, pero que siempre haga esfuerzos por tener lo mejor porque se lo ha ganado; un hombre que goce dando y que sepa recibir.
Un hombre que se respete a si mismo, porque así sabrá respetar a los demás; que no recurra jamás a la burla o a la ofensa, puesto que mas rebaja al que las hace que al que las recibe.

Un hombre que no tenga miedo de amar, ni se envanezca porque es amado; que goce cada minuto de amor como si fuera el último; que no viva esperando el mañana porque tal vez el mañana nunca llegue.
Cuando lo encuentre lo amaré intensamente. Y me pregunto:
¿Acaso ese hombre eres tu?

(Anonimo)

lunes, 4 de julio de 2011

Sueños

¿Sabes amor? Anoche mientras
dormia, senti una extraña
pero conocida sensacion.

Sentí unas manos recorrer
mi piel, senti un cálido
aliento besar mi cuello.

Sentí como unas fuertes manos
me despojaban poco a
poco de mi ropa.

Era tan real mi sensación
que sólo pronunciaba en
mis sueños tu nombre.

Todo fue tan real que al
despertarme sentí un dulce
cansancio, como el que sentía
cunando hacíamos el amor.

(22-ene-1999)

domingo, 3 de julio de 2011

La Promesa

Llegaste a la ciudad que amo, que tanto he soñado con regresar,
cerré mis ojos para ver si así podía transportarme hasta ti.
Desee tener la misma vista que tu desde mi ventana,
lloré al saberme lejos de ti y tu tan cerca de la tierra que amo.

Más lágrimas cuando al contarte mi más grande secreto que ahí dejé
guardado me pediste cumplirlo de tu mano.
Se que en algún momento viviré en el mismo espacio tuyo
aun no es el momento, pero la certeza de que así sera me mantiene viva.

Anhelo ver de tu mano esa maravillosa ciudad llena de luz,
besarte en esa calle, a la que prometí regresar solo si iba
al lado de la persona que amo y esa eres tu.

Esa promesa que la hice a la ciudad todavía no la cumplo,
todavía espero subir contigo la escalinata que me ha esperado
por mas de una década para ser subida.

Y si por alguna razón no pudiese regresar a ti, mi amada ciudad
pediría de último favor a mi gran amor que deje en un rincón
tuyo una flor en esa calle a la que tanto anhelo regresar,
como señal de mi amor por ti y por él.

SP